jueves, 12 de noviembre de 2009

¿Qué estas haciendo en este momento?

Tomado de http://ishanoshabla.blog.terra.com.mx/


Parece que todos tenemos una opinión sobre si Obama merece el Premio Nóbel de la Paz o si es demasiado prematuro. Después de oír muchas opiniones, expresadas aquí, sólo tengo una cosa que decir. Independientemente del premio, está claro que Obama tiene un deseo muy enfocado en lograr la paz en el mundo, pero mi pregunta no es acerca de Obama, mi pregunta es acerca de ti.

¿Con qué frecuencia nos sentamos a juzgar, criticar, comparar y evaluar las acciones de quienes nos rodean? Es muy fácil aplicar lo que en Australia llamamos el síndrome de la amapola mas alta –esto es, ese deseo de cortar lo que más se eleva y poner toda nuestra atención en criticar a la gente de nuestro mundo que ha alcanzado posiciones de poder y de éxito. Pero, ¿qué estás haciendo tú para crear paz en este momento?

Tengo una propuesta, vamos a considerar que todos somos elegibles para el Premio Nóbel de la Paz, y nos proponemos internamente traer paz a nuestro entorno. Luego, cuando tengamos claro ese propósito, podemos enfocarnos en dar paz interior a nuestras familias, nuestros amigos, nuestro medio ambiente, y en última instancia, a nuestro mundo. Porque la paz es responsabilidad de todos los seres humanos, no es responsabilidad de nuestros líderes. Es una elección que todos estamos haciendo en cada momento. ¿Me estoy amando a mí mismo? ¿Estoy en paz conmigo mismo? ¿Estoy dando todo lo que puedo o estoy sentado en mi pedestal, mientras analizo y juzgo el exterior?

La grandeza se manifiesta en acción. El victimismo espera que el exterior cambie para estar a salvo. Por duro que pueda parecer, esta es la realidad del 99% de la humanidad.

Cuando alguien tan noble como Obama presiona por el cambio dentro de un mundo tan conflictivo, automáticamente es elegible para cualquier premio de la paz. Como cualquier persona que esté dando a la humanidad en este nivel.

Recomendaciones para encontrar la paz interior

Cuando algo difícil o desafiante ocurra en nuestras vidas, podemos percibirlo como un obstáculo en nuestro camino o como una oportunidad para crecer. Nuestra forma de responder a esas situaciones, las puede transformar de problemas, a momentos de evolución personal. Observa la respuesta automática a criticar a las circunstancias y a etiquetarlas como “equivocadas”. Cuando te hagas consciente de esta elección, serás capaz de escoger algo diferente: elegir apreciar y aprovechar esas oportunidades para ser más, para rendirte a lo que es y para confiar en los regalos que el universo te está trayendo.

Si tu vecino va caminando distraído, pasa, y ni se da cuenta de ti, puedes elegir sentirte ofendido e ignorarlo tú también, o sonreír y decir ¡Buenos días!

Cuando a alguien se le cae algo, tenemos la oportunidad de recogerlo, o seguir caminando e ignorarlo.

Si alguien tiene un problema, podemos estar presentes y ofrecer nuestro apoyo, o hacernos la vista gorda, perdidos en nuestras propias distracciones.

Estos son pequeños ejemplos de situaciones cotidianas, donde nuestras elecciones nos muestran nuestro propio enfoque, y cómo estamos con nosotros mismos: si nos centramos en nuestros propios dramas y necesidades y como consecuencia, estamos enfocados en la carencia, o si estamos abiertos y disponibles para dar, enfocados en la abundancia, la alegría de vivir, y al servicio de la creación de vida.

¿Estás abierto a sentir cada aspecto de ti mismo, a gozar los sentimientos de alegría y abrazar tus penas, como un ser humano?

Cuando estás cansado y tu pareja, amigo o hijo ha tenido un mal día, ¿eres capaz de estar ahí para ellos, sólo como una presencia silenciosa? ¿O te sientes obligado a intervenir, para tratar de cambiar de tema o hacer que cambien su estado de ánimo, porque te sientes incómodo si no haces nada?

Sólo está atento para ver, en tu día, en qué áreas puedes estar más presente, más consciente. Desde ese espacio, cualquier acción que realices será más amorosa, más llena de paz para todos los que te rodean.

Sé como una esponja que absorbe todas las posibilidades de aprender de todo y de todos, enfocado en ser un cien por ciento en cada momento: “En este momento elijo ser la totalidad y, en cada momento, puedo ser más, más amor, más libertad, más ser“.

Yo siempre digo a mis estudiantes: “No importa lo que estás haciendo: lo importante es lo que estás siendo”. ¿Qué estás eligiendo ser en este momento?

No hay comentarios:

Publicar un comentario